Grupo de Física Médica se adjudica IDEA I+D de ANID para el desarrollo de parche hidrogel bioactivo para tratar heridas infectadas

 

 

Hilde en BIOPI

 

¿Se puede mejorar la actividad fotodinámica con algas fotosintéticas para potenciar la muerte de organismos patógenos? ¿El oxígeno producido por las algas puede ser usado para mejorar el tratamiento de las heridas? Estas son las preguntas en las que se basa al nuevo proyecto “The use of photosynthetic microalgae to enhance the photodynamic properties of a bioactive hydrogel for the treatment of infected wounds: towards an alternative therapeutic approach against drug-resistant microorganismsganador del fondo 2024 ANID IDEA I+D.

 

El proyecto es liderado por la académica del Instituto de Física Hilde Harb Buzzá y José Tomas Egaña del Instituto de Ingeniería Biológica y Médica como director alterno. Además, participan como investigadores principales Beatriz Sánchez e Ignacio Espinoza, ambos pertenecientes al grupo de Física Médica.

 

Durante los próximos dos años ANID financiará a este equipo multidisciplinario para generar un parche hidrogel bioactivo para tratar con luz heridas infectadas por microorganismos resistentes a antibioticos como bacterias con distintas estructuras de membrana (gram + y gram -) así como hongos como cándida.

 

“Cuando yo me integré al equipo de Física Médica, Ignacio y Beatriz ya tenían la idea de colaborar con Tomás, quien trabajaba con algas fotosintéticas para tratar heridas no infectadas, aumentando los niveles de oxígeno para mejorar la calidad del tejido y favorecer la cicatrización. Yo conocía cómo usar la luz para activar el fotosensibilizante y así matar microorganismos.  Cuando me integré al grupo, decidimos atacar un problema recurrente: infecciones que son resistentes a antibióticos. Juntamos el conocimiento de la cicatrización de heridas, las infecciones y la fotodinámica, e ideamos un apósito que con luz es capaz de hacer dos cosas claves: primero activar los fotosensibilizante y eliminar agentes infecciosos, ya sea bacterias u hongos, y luego, mejorar la cicatrización gracias al aumento de los niveles de oxígeno”, explica Hilde.

 

El proyecto partirá con un estudio in vitro, en el que se analizará el efecto de la luz absorbida por las algas en los distintos microorganismos por separado y en infecciones multiespecie para ver cómo reaccionan. A partir de esos resultados, se pasará a la aplicación en modelos preclínicos, para finalizar el proyecto un protocolo de tratamiento.