Instituto de Física participa en Feria de Ciencias del Centro de Internación Provisoria de San Bernardo
En el marco del Mes de la Ciencia, el Instituto de Física fue invitado a participar con un stand en la Feria Científica 2024 organizada por el área formativa y la biblioteca del Centro de Internación Provisoria (CIP) de San Bernardo. Esta institución atiende a jóvenes, desde los 14 hasta los 18 años, que requieren cumplir con la medida cautelar de privación de libertad. En la actividad participaron con entusiasmo y capacidad de asombro, más de 100 jóvenes, de las unidades 2, 3 y 4 del centro dependiente de Sename.

Hace unos meses, cuando nos contactaron para ver si podíamos participar con un stand de experimentos, la respuesta desde el Instituto de Física fue un sí inmediato. Debíamos estar presentes, ya que formamos parte de una Universidad que tiene un compromiso con la sociedad. Con el apoyo del decano, Samuel Hevia; Daniela Miranda, gestora de comunicaciones; Rosa Bahamondes, jefa de los laboratorios docentes y Fernando Villanueva, graduado de nuestro Magíster en Física, seleccionamos y preparamos un set de experimentos que fueran llamativos para los estudiantes. Junto a Fernando, asistimos como monitores de la actividad. Yo pensaba que el CIP era una especie de internado con reglas estrictas de comportamiento. Mi primera sorpresa fue, que al llegar, te recibe Gendarmería y hay que pasar por un proceso de registro estricto de los materiales que llevamos. De cualquier forma, el impacto inicial se disipó al conocer a los profesores y profesoras que atienden a los niños. Montamos nuestro stand, entró el primer grupo, “y se hizo la luz”. Los niños se volcaron rápidamente a los experimentos, haciendo preguntas de a varios al mismo tiempo, comenta Roberto Rodríguez, director del Instituto de Física.

El stand incluyó 10 montajes experimentales distintos, y los jóvenes pudieron experimentar con el momentum angular al subirse a una silla giratoria; observar cómo se anulaba la señal de una radio en la Jaula de Faraday; y sorprenderse cuando un imán flotaba en el aire en el montaje de superconductividad, entre otras experiencias.
Para mí, fue una oportunidad para dar a conocer otro mundo a niños que por diversas razones se encuentran con la medida cautelar de privación de libertad. Pese a la vida que les ha tocado, siguen siendo niños, y como tales, tienen curiosidad innata. Muchos de ellos mostraron gran asombro, lo cual siempre es bien recibido. Es muy grato despertar la curiosidad en las personas, en especial cuando hay interés y buena acogida, reflexiona Fernando Villanueva.

Nuestra plaza central se transformó en un vibrante escenario de aprendizaje y descubrimiento ese día. Los jóvenes no solo observaron, sino que, también, participaron activamente de una manera cercana y accesible, haciendo preguntas, realizando experimentos y jugando con los diferentes recursos disponibles. Este enfoque práctico y vivencial fue clave para fomentar el interés y la motivación por la ciencia. La Feria Científica 2024 fue, sin lugar a dudas, un éxito rotundo, dejando una huella significativa en todos los participantes y reforzando el papel fundamental que juega la ciencia en nuestra vida diaria, afirma Miguel González, Director del Centro de Internación Provisoria de San Bernardo.
En la feria también participó con un stand el Ministerio de Ciencias, la Biblioteca del CIP, y un grupo de jóvenes de la Institución junto a sus docentes, que expusieron a los miembros de la comunidad, experimentos y trabajos realizados durante las clases.
Otra cosa que rescato es que, al pasar todo el día en el CIP, tuvimos la oportunidad de conocer a parte del personal administrativo. Muchos de ellos son funcionarios de carrera, que han dedicado toda su vida a trabajar en Sename. Durante la jornada, también visitamos una de las casas donde viven los grupos de estudiantes; su biblioteca; los computadores conectados a una intranet interna; la cancha de fútbol, y la mesa de pingpong, todo un sistema, que aunque tiene carencias, está diseñado para el cuidado de esos niños. Partí con alegría de constatar que hay una organización detrás de ellos, y con tristeza de saber que muchos, al volver a la sociedad, reinciden. Sin embargo, me quedo con una frase de uno de los chicos, que me dijo “Cuando salga voy a estudiar”, reflexiona Roberto Rodríguez.